Sam-Joko "El cuervo de las tres patas"

Sam Joko (El cuervo de tres patas) "El que vive en el sol", Dios de la protección.

Su origen antecede su significado principalmente en la cultura Coreana, aunque también es conocido entre otas culturas de Asia y África del Norte, haciéndose presente en la mitología y distintas artes. Sam-Joko representa así pues, el origen.

En japón es más bien conocido como "Yatagarasu", el cuervo sagrado donde se cree que su aparición representa la interveción divina y la voluntad que repercute en la voluntad de los hombres. La representación del cuervo simboliza renacimiento, en antiguas batallas, representaba el renacer después de la tragedia.

En China, se le conoce como "Yangwu" o "gallo de oro" y generalmente se le representa como un cuervo rojo. Anteriormente se tenía la creencia de que existían diez cuervos del sol, establecidos en 10 soles separados y estos viajaban alrededor del mundo, en carros conducidos por Xihe, la "madre" de los soles; cada vez que uno encaminaba el regreso al sol, otro salía a recorrer el mundo. Los cuervos representaban ciertos tipos míticos como la inmortalidad, el cultivo, la tierra o la primavera, etc. Cada vez que alguno descendía a la tierra había un festín con los humanos, pero dado que a Xihe, no le agradaba esta convivencia, tapaba los ojos de los cuervos para evitar que vieran los poblados de los hombres.

Estas viejas leyendas también hablan de la desaparición de los otro nueve cuervos, donde se cuenta que cuando los diez salieron desde el sol, el mismo día, hicieron quemar el mundo lo que provocó que Houyi, el arquero celeste, derribó a todos, excepto a uno de los cuervos del sol, refiriéndose muy posiblemente al actual Yangwu.

El significado más místico, para el cuervo de las tres patas, es quizá el que se le ha dado en Corea, donde surge el nombre de "Samjok-o" y era considerado un símbolo sagrado del sol. El pueblo de Goguryeo creía que era un cuervo de tres patas que vive en el sol, mientras que una tortuga vive en la luna. Es durante la dinastía Goguryeo que se toma a Sam-Jok-o como un símbolo de poder y prestigio, superior tanto al dragón como al Bonghwang (un pájaro mitológico del sudeste asiático que, según la leyenda, domina al resto de aves, su apariencia es de un ave con pico de gallo, cara de golondrina, frente de ave salvaje, cuello de serpiente, espalda de tortuga, trasero de ciervo y cola de pez. En representaciones más modernas del ave Bonghwang, incluyen además partes de faisán dorado, pato mandarín, pavo real, grulla y loro, pero ni por esto tomó más importancia que Sam-Joko, el cuervo sagrado).

Sam-Joko (inferior) y Bonghwang (superior).

Con el tiempo, la leyenda coreana de Goguryeo no ha variado del todo, y Sam-Joko, tomó lugar como dios de la protección y el ave que representa el origen de la Tierra, o hasta del universo mismo, por aquella analogía a su procedencía del sol y lo que representa el gran astro en la historia de la humanidad.